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03 Sep
03Sep

Una vez más en mi vida, el Fuego ha terminado con muchas cosas, y una de ellas es el modo en el que venía viviendo. Se imponen muchas correcciones. Es imposible (e inadecuado) resumirlas aquí, pero tal vez la más relevante sea una gran enseñanza de la Sagrada Defensa para mi presente: 

La Defensa requiere quedarte solo con las relaciones que te quieren ayudar y cuidar. Debes distanciarte de toda relación que atenta contra tu seguridad, o que cuando se presenta una crisis grave, no solo no te facilita ayuda, sino que además aumenta tus problemas porque te suma dolor, angustia y conflicto.

La Defensa es lo que es, y exige lo que exige. La primera cosa es apretarse el cinturón, y ceñirse "para lo que viene". La preparación para las crisis no consiste en capricho y derroche, sino en entrenarse para la firmeza y la resistencia. 

Los ángeles de la defensa ya me visitaron en el año 2014, diciéndome que debía aprender a "medir" a mis compañías tomando ejemplo de cómo el bíblico Gedeón seleccionó a sus guerreros. Ya entonces me dijeron "Solo puede estar a tu lado quien pueda ceñirse (como tú) con austeridad".

La austeridad es una virtud y maestría del Espíritu del Teleno, así que no es casualidad que yo esté viviendo cerca de él, sino que es parte de la coherencia (guiada y estudiada) de mi camino espiritual. Pero me he encontrado con mucha gente que pretende "ser guerrera" y luego se pasa el día con exigencias y ocupándose de pijaditas. En fin. 

Volviendo al tema de este post (que me está quedando como un desahogo), la página urboreas.es se hizo para DAR gratuitamente un legado. Yo tenía que dar como la Naturaleza da. Fue como realizar un sacrificio en el sentido de "ofrenda", pues puse ahí mucho de mí misma, y compartí montones de cosas abiertamente, porque así tenía que ser. Era "dar a los hambrientos". Y la página cumplió con creces su cometido.

Creo que nadie puede quejarse de que se quedó "con hambre", pues atiborré con contenido a los lectores, hasta el punto de que muchos ni siquiera podían con todo, pues era más de lo que podían abarcar. Pero así tenía que ser. Así es La Naturaleza cuando se pone en modo exuberante. 

Pero ahora se me impone otra etapa y otro aprendizaje. Vino el Fuego y cambió todo. Ahora me toca concentrar mi energía, dejar de "regalar" a desconocidos y centrarme en conseguir lo que necesito para sacar adelante la supervivencia de mi hijo y la mía propia.

No significa que vaya a dejar de escribir, pero todo va a vivir una re orientación. Volveré a priorizar los libros, de ahí que esta página se centre en ellos. 

En resumen: se terminó una etapa de mucha apertura, parecida a una fiesta en la que invitas a todo el mundo. Paso a una etapa de cierre, de privacidad aumentada, pero es que es la condición que me impone la Sagrada Defensa para proteger mi vida, y yo no voy a pretender saber más que la Defensa. Porque la experiencia me ha mostrado de manera sobrada que el Mundo Sagrado sabe más que yo y que cualquier pequeño ser humano. 

Todo tiene su tiempo. La misma Naturaleza se repliega, asustada, y después esquilmada, en un incendio. Personalmente he vivido demasiadas cosas intensas, profundas y graves en estas semanas, y ya no soy la misma. No.

Aunque la hierba vuelva a crecer, cuando has visto el rostro del Fuego Destructor, eso no se te olvida y te queda claro su mensaje, que se resume en:

"Quédate solo con lo que el Fuego Sagrado no quiera destruir, pues lo ve valioso. Vete a la esencia. Protege tu espacio. Protege tu alma. Invierte solo en lo que verdaderamente sepas que "sirva" a Dios y a la Vida. Y escucha a la Sagrada Defensa, sé inteligente y sigue Su consejo, y ciñete al mismo, sin importar lo que opinen o digan los humanos que te rodean"


(La imagen de arriba ilustra una flecha de Chernobog tratando de alcanzar en el pecho Zare Zarnitsa, diosa del Amanecer, y Defensa Celestial viniendo, enviada por Perun (dios del Rayo y el Trueno), llegando de manera salvadora. Pero si no sabes cerrar tus ventanas al mal, y si no aceptas el don del Cielo ni sigues su consejo, de nada te servirá rezar. Chernobog quería obligar a Zare Zanitsa a ser su esposa. Siempre hay algo "sucio" tratando de adueñarse de lo sagrado, pero también existe una Defensa en el Cielo para evitarlo. La leyenda completa puede leerse aquí https://velesovskazes.ucoz.ru/news/strelki_bliskavicy/2014-01-18-221 )



 

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